Independientemente de que sólo alquiles tu propiedad unos pocos fines de semana al año o, por el contrario, lo hagas con más asiduidad, seguramente estarás de acuerdo con nosotros en lo importante que es definir una serie de normas en tu alquiler vacacional.
Si bien todos desearíamos que nuestra relación con los huéspedes fuese invariablemente fluida, la realidad tiene un particular empeño en no ajustarse a las expectativas: ten por seguro que, ocasionalmente, te tocará lidiar con roces o malentendidos.
Afortunadamente, hay una forma muy fácil de curarse en salud: adjuntar las normas de la casa al contrato de alquiler vacacional, otro de los documentos que siempre recomendamos que firmen tanto anfitrión como huéspedes.
La ventaja de fijar normas en tu alojamiento es que así dejas bien claras tus expectativas. Tus huéspedes no podrán poner de excusa no conocerlas, ya que previamente al check-in les tocará firmarlas. Por este motivo, son muy útiles en caso de haber discrepancias.
Nosotros hemos creado una plantilla de normas de la casa para alquileres vacacionales, que puedes descargar totalmente gratis. Para hacerlo, simplemente introduce tu nombre y correo electrónico en la caja que aparece a continuación.
¿No ves el formulario para descargarte nuestro modelo de normas de la casa? Haz clic aquí.
Nuestra plantilla es personalizable, así que podrás adaptarla a tus necesidades con facilidad. ¿Quieres utilizar un tono formal? No hay problema. ¿Prefieres optar por un lenguaje más distendido, que reduzca las posibilidades de que tus huéspedes lo perciban como un escrutinio innecesario? ¡Adelante, a ello te animamos!
Dicho esto, algunos puntos nunca deberían faltar. Sigue leyendo para conocer qué debes incluir sí o sí en el reglamento para los huéspedes de tu alquiler vacacional.
¿Qué debe incluir la plantilla de normas de tu alquiler vacacional?
Si bien todos somos capaces de pensar en un par de reglas básicas para cualquier alojamiento turístico, a veces puede resultar complicado tener en cuenta todos los posibles escenarios a los que un propietario podría haber que enfrentarse.
Uno de los factores que más suele ayudar es, curiosamente, el paso del tiempo. La experiencia ganada a medida que vayas alquilando tu propiedad te ayudará a determinar qué incluir en las normas de uso de tu alquiler vacacional.
No obstante, si aún estás empezando, lo más lógico es que no quieras ir a ciegas. Una buena opción es revisar los anuncios de tus competidores. Airbnb permite añadir un resumen de las reglas de la casa, así que darte una vuelta por esta y otras plataformas te permitirá hacerte una idea de qué es común incluir de forma rápida y sencilla.
Dicho esto, una forma más rápida de conocerlo es utilizando una plantilla de normas de la casa para tu alquiler vacacional. ¿Quieres saber cuáles son las reglas indispensables que debes tener para tu alojamiento turístico? ¡Sigue leyendo y descúbrelas!
1. Presentación del documento
La mejor manera de redactar las normas de tu alquiler vacacional es empezando por el principio. Esa primera sección del documento es perfecta para explicar por qué es necesario establecer una serie de reglas que todos aquellos que entren en la propiedad deben cumplir.
Evita usar un lenguaje demasiado complejo. De este modo, las normas de tu alojamiento serán fáciles de entender. Piensa que si escribes un documento excesivamente largo, lo más probable es que tus huéspedes se sientan abrumados y dejen de leer.
Por otra parte, si quieres añadir consejos u otros puntos que creas menos importantes, déjalos para cuando te encuentres cara a cara con los viajeros, o añádelos a la carta de bienvenida de tu alquiler vacacional.
2. Requisitos generales
Este segundo punto te permitirá destacar las normas básicas o aquellas que no pertenecen a ninguna de las cláusulas a continuación. Por poner un ejemplo, puedes especificar quién debe ser la primera persona a la que los huéspedes deben contactar en caso de haber problemas, aunque esto también te recomendamos que lo hagas en el apartado relativo a los contactos de emergencia.
3. Convivencia y ruidos
La cantidad de municipios y/o comunidades de propietarios que restringen de algún modo el alquiler vacacional es cada vez mayor, así que lo último que quieres como anfitrión es deteriorar tu relación con los vecinos.
Puedes utilizar nuestra plantilla de normas de la casa para puntualizar la importancia de no hacer demasiado ruido a partir de ciertas horas, por ejemplo. Los vecinos te lo agradecerán y así evitarás tener que atender a quejas en un futuro.
¡Ojo! A veces, las normas de tu alquiler vacacional no bastan para disuadir a ciertas personas de hacer ruidos. Para estos casos, un sistema como Minut es mano de santo.
4. Capacidad del alojamiento y huéspedes adicionales
¿No permites visitas durante la estancia de tus huéspedes? Házselo saber. Del mismo modo, si quieres establecer limitaciones en cuanto al número de invitados que pueden pasar el rato en tu alquiler vacacional, deberías dejarlo claro en esta sección.
5. Uso de la propiedad
Una de las principales preocupaciones de muchos anfitriones es que sus huéspedes organicen fiestas en la propiedad. Hay casos y casos, pero por norma general estas celebraciones suelen venir acompañadas de excesos, ruidos y daños.
La mejor forma de cubrirse las espaldas es prohibirlas directamente en las normas de tu apartamento turístico, de modo que si alguien quiere organizar una fiesta, ni siquiera se moleste en reservar tu alojamiento en la plataforma.
Si a pesar de todo sigues teniendo problemas con las fiestas no autorizadas, siempre puedes probar a utilizar un detector de ruido como Minut.
6. Aparcamiento
¿Hay sitio para aparcar en tu propiedad o cerca de ella? ¿Cuántos coches caben?
Si alguna vez has tenido problemas con huéspedes que han aparcado en la plaza de garaje de un vecino, nuestra recomendación es que especifiques esta información en las normas de la casa de tu alquiler vacacional.
¡Te ahorrarás muchos dolores de cabeza, y los viajeros sabrán qué esperar al llegar a la vivienda!
7. Tratamiento de residuos
Siempre y cuando seas razonable, no pasa nada por incluir ciertas pautas con respecto a la basura en el reglamento para huéspedes de tu alojamiento. Por ejemplo, puedes pedir a los viajeros que separen los residuos en función del material, con el objetivo de facilitar su reciclaje. Otra opción típica es solicitar que dejen los platos sucios dentro del lavavajillas.
Muchos viajeros eligen un alquiler vacacional porque quieren sentirse como en casa incluso estando lejos de ella, así que no les importará encargarse de cosas como estas que realmente no implican un gran esfuerzo y hasta se pueden considerar de cortesía básica.
Eso sí, intenta no pasarte: pretender que tus huéspedes hagan la colada antes de marcharse no es de recibo. Al fin y al cabo, ¡para eso está el servicio de limpieza!
8. Normas de seguridad
La mayoría de los huéspedes tienen “sentidiño”, pero, por si acaso, nunca está de más estipular en las reglas de la casa que deben cerrar las ventanas o la puerta con llave cuando salgan de la propiedad.
Intenta transmitírselo empatizando con ellos: si hacen caso de tus indicaciones, sus pertenencias estarán más seguras y se ahorrarán posibles disgustos.
Por último, también puedes aprovechar esta sección para recordarles la importancia de ahorrar energía. Un ejemplo: “Cuidemos del planeta. Por favor, apagad las luces, el aire acondicionado y cerrad las ventanas al salir. ¡Muchas gracias!”
9. Uso de la piscina o el jacuzzi
Si tu alojamiento tiene jacuzzi o piscina (¡vaya gustazo!), asegúrate de estipular cualquier restricción al respecto en el reglamento para huéspedes del mismo.
¿Un par de ejemplos? Cuáles son las horas de uso aceptables o qué clase de objetos está prohibido introducir dentro (p. ej. vidrios u objetos punzantes) ¿Otro? Si aceptas mascotas, seguramente no quieras que se bañen en la piscina, dejándola llena de pelos y atascando los filtros.
10. Uso del balcón o la terraza
Un buen balcón puede ser ideal para disfrutar de las vistas, pero quienes vivimos en España sabemos muy bien que algunos turistas prefieren darles un uso menos convencional, por decirlo de alguna manera.
No puedes controlar al 100% lo que hacen tus huéspedes, pero igualmente no está de más prohibir explícitamente prácticas de riesgo como el «balconing».
11. Uso de tabaco
¿Permites fumar en tu propiedad? ¿O, por lo contrario, está totalmente prohibido?
Evita sorpresas (d)olorosas dejando bien claro en las normas de tu alquiler vacacional tu postura al respecto. Si no quieres que los huéspedes fumen dentro, pero no te importa que lo hagan en la terraza o en el jardín, también puedes especificarlo.
12. Presencia de animales
Muchos anfitriones están en contra de aceptar mascotas dentro de sus alojamientos, temerosos ante los posibles daños y suciedades que éstas pudieran ocasionar. Sin embargo, cada vez es más frecuente que los huéspedes quieran llevarse a sus animales de viaje.
Por este motivo, es indispensable que dejes bien clara cualquier restricción al respecto en las reglas de tu alquiler vacacional. Si aceptas la presencia de mascotas, pero con ciertas condiciones, asegúrate de dejarlas bien claras y por escrito.
13. Uso de la barbacoa
Una buena barbacoa es a una piscina como el agua es al chocolate… Si tienes ambas, disfrutarás de una importante ventaja competitiva durante los meses de verano. Dicho esto, la barbacoa es una máquina y, para que dure, ¡hay que cuidarla!
Aprovecha el documento con las normas de tu alojamiento turístico para especificar el funcionamiento de la misma y qué conductas se deben seguir para garantizar un uso seguro y responsable de la misma.
14. Uso de la chimenea
No todos los anfitriones se sienten cómodos con que sus huéspedes usen la chimenea del alojamiento. Las razones pueden ser de todo tipo: quizás haga mucho humo al encenderla, tu seguro te lo prohíba o el conducto de humos haya sido bloqueado en el pasado.
Sea por el motivo que sea, si no quieres que se use la chimenea, no tienes más que añadirlo a las normas de la casa de tu alquiler vacacional.
15. Daños y desperfectos
Los accidentes ocurren, eso lo sabemos todos. Por eso, en vez de asustar a los huéspedes diciéndoles que podrían perder toda la fianza si rompen un plato, limítate a aclarar que cualquier daño o desperfecto debe ser comunicado de inmediato. Así, tendrás flexibilidad para actuar caso por caso.
¿Otra cosa que puede ser interesante añadir a las normas de la casa? ¡La prohibición de mover muebles de una habitación a otra! Hay huéspedes que son cuanto menos excéntricos, como verás si lees nuestro artículo con las peores historas de terror en Airbnb.
16. Información de check-out
Puede que ya hayas informado a tus huéspedes qué esperas de ellos una vez abandonen el alojamiento, pero no está de más enviarles esta información de nuevo un día o dos antes del check-out. Asegúrate de hacer hincapié en aspectos como la limpieza o la entrega de llaves.
17. Contactos de emergencia
¡Muy importante! Tus huéspedes deben tener a su disposición los números de contacto de los principales servicios de emergencias: ambulancias, bomberos y policía, como mínimo. Tampoco obvies proporcionarles un teléfono atendido las 24h para cualquier incidencia que pudiese surgir durante su estancia, ya que todo lo anterior es obligatorio en muchas comunidades autónomas de España.
Nota: Si bien esta información no tiene por qué figurar necesariamente en las normas de la casa (pudiendo aparecer en un cartel informativo dentro de la propiedad), en nuestra opinión nunca está de más añadirla en este documento.
18. Cumplimiento y validez
Por último, aprovecha la sección final del documento para aclarar que incumplir cualquiera de las reglas especificadas en el mismo es sinónimo con incumplir el propio contrato de alquiler vacacional, con las consecuencias que ésto acarrearía.
Conclusiones
Todo anfitrión que quiera alquilar su propiedad con garantías hoy en día debe hacer firmar las normas del alquiler vacacional a sus huéspedes, independientemente de si proceden de Airbnb, Booking.com o incluso la propia web del alojamiento.
No tengas miedo de parecer desconfiado: establecer reglas razonables para tus huéspedes es una práctica estándar hoy en día, y redunda en una mejor experiencia para todos. ¡Piensa en el tiempo que te ahorrarás al no tener que repetir indicaciones una y otra vez!
¿Aún no sabes por dónde empezar? ¡Descárgate nuestra plantilla gratuita con normas de la casa para alquileres vacacionales y rellénala con tu información para personalizarla!
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